¿Existe ‘Ascendencia Francesa’ en Los Altos de Jalisco?
| |Cuántas veces hemos visto a una hermosa mujer rubia de ojos de color y escuchamos decir “ha de ser de los Altos de Jalisco” y es que hay una creencia que viene de la segunda intervención Francesa, de la cual se empezó a decir que algunos de los invasores dejaron de hacer la guerra para hacer el amor, instalándose así en varias zonas rurales, no solo en Jalisco sino también en Michoacán o Guanajuato, dejando su descendencia con su característica cabellera rubia, tez blanca como leche y ojos claros, características diferentes con las que se tiene identificado a un “mexicano” o a un “mestizo”, pues eso solamente es un mito, y poco a poco se han ido esclareciendo y aceptando como una leyenda urbana.
Alfonso Reynoso Rábago Investigador del CUAltos, realizó una compulsa de censos parroquiales en la Colonia: “La ascendencia francesa es sólo un mito” arrojando los siguientes resultados, en cuatro municipios clave de la región, en el período de 1800 a 1805, fueron estandarizados en hojas de cálculo y arrojaron las siguientes proporciones: en Teocaltiche, 61 por ciento eran indígenas; 31, españoles, 4, mulatos, y 3, mestizos. En Lagos de Moreno (entonces llamado Santa María de Los Lagos), 41 por ciento era población indígena; 13, de españoles, 15, de mulatos y 24, de mestizos. En Jalostotitlán, los indígenas eran 53 por ciento; los españoles, 28, los mulatos, 15 y los mestizos, 4. Finalmente, en Tepatitlán, 60 por ciento de los niños bautizados eran españoles; 18, mulatos, 17, indios, y 4, mestizos.
“Con este se confirma que sólo Tepatitlán era la única comunidad de los Altos de Jalisco que había tenido mayoría española en el periodo colonial. Y estos datos demuestran que la alteña es una sociedad pluriétnica, con presencia más importante, en este orden: de indios, españoles y mulatos”, mencionó.
El Dr. Jesús González Martin dice que se toma como referencia sobre la descendencia francesa la Plaza de Atotonilco, ya que hay influencia francesa en la Arquitectura y abunda el apellido Franco, eso por una lado, por otro lado, y con mayores argumentos, menciona que no hay ningún elemento que lo confirme, si todos los apellidos son españoles y son evolución de estos, no hay ni siquiera un elemento francés, ni cultural, ni somático, ni folclórico lingüístico, sociológico y –sobre todo- histórico-genealógicos que señalen la procedencia española “¿con qué base sostienen aún algunos que el alteño desciende de franceses?” mencionó.